La creciente interconexión global exige poblaciones resilientes capaces de responder a crisis sanitarias. La educación ciudadana emerge como una herramienta fundamental para fortalecer la preparación ante pandemias. Como objetivo nos proponemos a examinar la integración de la educación ciudadana con los principios epidemiológicos para fortalecer la preparación y resiliencia social ante futuras emergencias sanitarias. La metodología consistió en una revisión sistemática de literatura científica y estudios de caso sobre intervenciones de comunicación de riesgo y respuesta comunitaria durante pandemias recientes. Los resultados principales indican que las poblaciones con mayores niveles de alfabetización en salud pública mostraron una adherencia 40% superior a las medidas de protección no farmacológicas, como el uso de mascarillas y el distanciamiento social. Asimismo, se identificó que la comprensión de conceptos epidemiológicos básicos, como la tasa de reproducción (R0) y la inmunidad de grupo, se correlaciona positivamente con una menor circulación de desinformación y una mayor confianza en las autoridades sanitarias. En conclusión, la incorporación formal de la epidemiología en los programas de educación cívica constituye una estrategia fundamental para construir capital social con capacidad de respuesta. Esta sinergia permite transformar el conocimiento científico en acción colectiva informada, reduciendo la polarización social durante crisis sanitarias y facilitando la implementación temprana de medidas de contención. La educación ciudadana epidemiológicamente informada se erige, por tanto, como un bien público esencial para la seguridad sanitaria global y la mitigación de los desafíos futuros.