Esta revisión sistemática sintetiza los hallazgos radiológicos de la infección por el virus Chikungunya (CHIKV), basándose en la evidencia extraída de 10 artículos de investigación. El análisis destaca la naturaleza de la afectación articular en sus fases aguda y crónica. La evidencia confirma que la artritis por CHIKV es una artritis inflamatoria erosiva crónica, capaz de causar daño articular significativo a largo plazo, con progresión documentada hasta 13 años después de la infección inicial. Los métodos de imagen son cruciales para el diagnóstico, la evaluación de la extensión y el seguimiento de la enfermedad. La Resonancia Magnética (RM) se establece como la modalidad más sensible para la detección temprana de la enfermedad, especialmente en los primeros meses post-infección. La RM es fundamental para revelar lesiones profundas como el edema de médula ósea, el engrosamiento sinovial y las erosiones óseas, incluso cuando las radiografías son normales. La Ecografía (US), por su parte, es una herramienta excelente para evaluar la inflamación de tejidos blandos, identificando la tenosinovitis (un hallazgo prevalente en manos, muñecas y tobillos) y el derrame articular con alta precisión, a menudo con signos de hipervascularización. Los hallazgos patológicos más comunes incluyen la tenosinovitis, el derrame articular (frecuente en la articulación tibiotalar), la bursitis (principalmente retrocalcánea) y las erosiones óseas. La prevalencia de la tenosinovitis en el compartimento flexor de las manos alcanza el 44.2% en pacientes crónicos.