Dentro de la amplia gama de afecciones oftalmológicas, una de las más frecuentes en los servicios de urgencias, son los traumatismos oculares. Estos pueden ser tan simples como la presencia de un cuerpo extraño superficial, hasta más complejos como el estallido del globo ocular con daños devastadores para la anatomía y la fisiología de este órgano, incluyendo su pérdida.El pronóstico visual después de un trauma ocular depende de la conducta inicial que tome quien lo reciba, de ahí la importancia de que todo médico se prepare para realizar un diagnóstico presuntivo o positivo, y asumir la conducta que corresponda en cada caso, lo que implica una gran responsabilidad en la atención médica dentro del nivel primario de salud. Teniendo en cuenta, además, que la mayoría de los traumas oculares ocurren en el ambiente doméstico y laboral. Por tanto, es necesario una capacitación sistemática para los profesionales de la atención primaria de salud, que contribuya a elevar su nivel de conocimientos sobre la prevención, el diagnóstico y manejo de los traumas oculares. Aunque es evidente, que el tratamiento de los traumas oculares complejos se lleva a cabo en centros de atención especializada.